Arquitectura Blackwell y GPT‑5.5: ¿El avance de Nvidia y OpenAI hacia la AGI?
¿Por qué el Blackwell B200 es el procesador de IA más potente del mundo? En el GTC 2024, Nvidia presentó su arquitectura Blackwell de nueva generación junto al GPU B200 y el superchip GB200, que integra 208 mil millones de transistores y una eficiencia energética sin precedentes. OpenAI ya ha iniciado el entrenamiento de GPT‑5.5 sobre esta plataforma, en lo que muchos consideran un paso clave hacia la AGI (inteligencia artificial general).

¿Qué es la arquitectura Blackwell?
Blackwell es la última arquitectura de GPU para centros de datos de Nvidia, desarrollada con un proceso 4NP e integrada por 208 mil millones de transistores. Combina dos chips GB100 en un único superchip (GB200), mientras la quinta generación de NVLink permite conexiones GPU a 1.8 TB/s — estableciendo un nuevo estándar de potencia computacional.
GPT‑5.5 y OpenAI: ¿por qué importa?
Impulsado por el GB200, OpenAI utiliza esta plataforma para entrenar GPT‑5.5 y acelerar la investigación en AGI. En los benchmarks de MLPerf, el B200 logra un rendimiento 2.2 veces superior al H100 — convirtiéndose en la opción principal para modelos de lenguaje extensos y cargas avanzadas de IA.
Ventajas y eficiencia energética
El GB200 ofrece hasta 30 veces el rendimiento en inferencia que el H100, reduciendo el consumo energético hasta 25 veces. Innovaciones como la segunda generación del Transformer Engine, soporte para FP4/FP8 y un diseño modular aumentan notablemente la eficiencia para tareas de IA a gran escala.
Riesgos y retos técnicos
Pese al progreso, existen desafíos como la gestión térmica, soluciones avanzadas de refrigeración y posibles cuellos de botella en la cadena de suministro. Todavía es incierto el rendimiento de esta arquitectura en cargas de trabajo prolongadas en servidores.
El mapa futuro de la tecnología IA
Con el sistema GB200 NVL72, Nvidia está desplegando centros de datos de nueva generación por Europa. Resta ver cómo OpenAI aprovechará estos recursos, no solo para GPT‑5.5, sino para futuras aplicaciones AGI.
Conclusión
Blackwell y GPT‑5.5 demuestran que el avance en IA hoy depende tanto del hardware como de los algoritmos. Aunque la AGI aún parece lejana, la tecnología la acerca a pasos agigantados.
📌 ¿Crees que la AGI ya está cerca, o solo vivimos una nueva ola de expectativas?
✍ Thornike • 25 de junio de 2025